
Permitir la alimentación complementaria apropiada.
Contexto aplicable/grupos de población: todos los países, bebés y niños pequeños de 6 a 23 meses
Recomendaciones OMS
Los bebés deben ser amamantados exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida, para lograr un crecimiento, desarrollo y salud óptimos. A partir de entonces, para cumplir con sus requisitos nutricionales en evolución, los bebés deben recibir alimentos complementarios nutricionalmente adecuados y seguros, mientras continúan amamantando hasta por lo menos 2 años o más.
Para el niño amamantado de 6 a 23 meses:
- Practique la lactancia materna exclusiva desde el nacimiento hasta los 6 meses de edad e introduzca alimentos complementarios a los 6 meses (180 días) mientras continúa amamantando. Continúe con la lactancia materna frecuente y bajo demanda hasta los 2 años de edad o más.
- Practique la alimentación receptiva , aplicando los principios de la atención psicosocial.
- Practique una buena higiene y el manejo adecuado de los alimentos.
- Comience a los 6 meses de edad con pequeñas cantidades de alimentos y aunque la cantidad a medida que el niño crece, mientras mantiene la lactancia manterna frecuente.
- Aumente gradualmente la consistencia y variedad de alimentos a medida que el bebé crece, adaptándose a sus requerimientos y habilidades.
- Aumente la cantidad de veces que el niño recibe alimentos complementarios a medida que crece.
- Alimente una variedad de alimentos para garantizar que se satisfagan las necesidades de nutrimentos.
- Según sea necesario, use alimentos complementarios fortificados o suplementos de vitaminas y minerales (preferiblemente mezclados o con alimentos) para el bebé.
- Aumente la ingestión de líquidos durante la enfermedad, incluida la lactancia materna más frecuente, alentando al niño a comer alimentos suaves, variados, apetitosos y favoritos. Después de la enfermedad, dele alimentos con más frecuencia de lo habitual y anime al niño a comer más.
Para el niño no amamantado de 6 a 23 meses de edad:
- Asegúrese de que se satisfagan las necesidades energéticas del niño.
- Practique una buena higiene y el manejo adecuado de los alimentos.
- Practique la alimentación receptiva, aplicando los principios de la atención psicosocial.
- Aumente gradualmente la consistencia y variedad de alimentos a medida que el bebé crece, adaptándose a sus requisitos y habilidades.
- Para el lactante sano promedio, las comidas deben proporcionarse de cuatro a cinco veces por día, con meriendas nutritivas adicionales ofrecidas una o dos veces por día, según se desse.
- Alimente con una variedad de alimentos para garantizar que se satisfagan las necesidades de nutrimentos.
- Según sea necesario, use alimentos enriquecidos o suplementados de vitaminas y minerales (preferiblemente con alimentos) que contengan hierro.
- Los lactantes y niños pequeños no amamantados necesitan al menos 400-600 ml/día de líquidos adicionales en un clima templado y 800-1200 ml/día en un clima cálido.
- Aumente la ingestión de líquidos durante la enfermedad y aliente al niño a comer preparaciones suaves, variadas, apetitosas y favoritas. Después de la enfermedad, dele alimentos con más frecuencia de lo habitual y anime al niño a comer más.
Evidencia clave:
- La alimentación complementaria se refiere al consumo de alimentos sólidos o semisólidos a partir de los 6 meses, cuando la leche materna sola ya no es suficiente para satisfacer las necesidades nutricionales de los bebés.
- La alimentación complementaria óptima es fundamental para prevenir la desnutrición durante un periodo de tiempo en que aumenta la infección causada por la contaminación de los alimentos y cuando los alimentos de baja densidad a menudo se usan para remplazar la leche materna.
Acciones clave para su implementación.
Brindar asesoramiento y apoyo de calidad a madres y cuidadores para una alimentación complementaria adecuada a nivel de las instalaciones y la comunidad, incluida la comunicación de cambio de comportamiento con respecto a las prácticas óptimas de alimentación a otros tomadores de decisiones familiares y comunitarios.
Maximice el uso de alimentos producidos localmente en cualquier entorno.
Si los alimentos disponibles localmente no satisfacen los requsitos nutricionales, considere alimentos/productos alternativos, polvos de micronutrimentos para fortificación en el punto de uso o suplementos nutricionales basados en lípidos.
Referencias.
- Guiding principles for feeding non-breastfed children 6–24 months of age. Geneva: World Health Organization; 2005 (https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/43281/9241593431.pdf?sequence=1, accessed 10 May 2019).
- Pan American Health Organization, World Health Organization. Guiding principles for complementary feeding of the breastfed child. Washington (DC): Pan American Health Organization; 2003 (https://www.who.int/ nutrition/publications/guiding_principles_compfeeding_breastfed.pdf, accessed 10 May 2019).